Antes de iniciar el confinamiento ya sabíamos que íbamos a estar pendientes de la Covid-19 durante bastante tiempo. El virus ha venido para quedarse y, aunque los meses más duros ya han pasado, un exceso de confianza en estos momentos nos puede hacer mucho daño. No hay que olvidar que sigue entre nosotros, y que los casos de infectados han vuelto a subir en Canarias, sobre todo entre las personas más jóvenes.
La distancia de los últimos meses, las ganas de ver a nuestros familiares y amigos también nos pueden jugar malas pasadas. Es difícil resistirse a dar un beso o un abrazo a personas cercanas, pero se está viendo que las reuniones sociales y las fiestas están provocando un repunte de contagios.
Sigue siendo posible quedar con familiares y amigos hasta un máximo de 10 personas, pero cumpliendo con las medidas sanitarias. Es raro tener que hablar a un metro y medio de distancia con un amigo de toda la vida, pero es necesario. Por su bien y por el tuyo.
En este sentido, cabe recordar que según las autoridades sanitarias, en las reuniones solo están exentos de usar mascarillas las personas convivientes.
Estos vídeos son impactantes, pero son un ejemplo realista de lo que puede pasar si no nos andamos con ojo.