En nuestra propia casa podemos hacer muchas cosas para evitar la propagación del Coronavirus. La primera de ellas y la más importante es quedarse en casa, tal y como indica el estado de alarma, pero con la adecuada limpieza del hogar también se evitan muchos males.

En general, hay que ventilar las habitaciones de forma frecuente. Como mínimo, 5 minutos al día. Para el lavado de la ropa, cuando sea posible, es recomendable usar agua caliente, 

Si decides ir a una lavandería, sigue las mismas recomendaciones que en otros lugares: lleva guantes, no te toques la cara y quítatelos correctamente. La forma mediante la que entran los virus en nuestro organismo es a través de la boca, nariz y ojos, así que si no tienes guantes, lávate las manos y nunca te toques la cara.

En cuanto a la limpieza específica, estas zonas tienen especial interés:

  • Pomos y manecillas de puertas, ventanas y cajones.
  • Barandillas y pasamanos.
  • Interruptores, botones, pulsadores, etc.
  • Botones de ascensores.
  • Teléfonos, telefonillo.
  • Mandos a distancia.
  • Superficies que se tocan de electrodomésticos, mesas, sillas y otros muebles. 
  • Grifos
  • Utensilios de cocina.

Estas zonas se pueden limpiar, simplemente, con agua y jabón o un limpiador común con total efectividad. En caso de superficies que se toquen con frecuencia y en el baño, después de este paso, desinfectar.

Si se usa lejía, la fórmula es la siguiente: 20 ml de lejía (de 3-5%) con 980 ml de agua, justo antes de limpiar. Dejar cinco minutos en la superficie y aclarar después. También existe desinfectantes virucidas autorizados por el Ministerio de Sanidad.

Ten mucho cuidado, no obstante, con mezclar productos de limpieza. Según el Instituto Nacional de  Toxicología, ha habido un aumento considerable de intoxicaciones por este motivo.

La combinación tóxica más habitual ha sido la de lejía y amoniaco. Esta mezcla genera un gas llamado cloramina, que cuando entra en contacto con las mucosas se descompone para producir ácido clorhídrico, muy tóxico y altamente corrosivo. Nunca mezcles diferentes productos y lee siempre la etiqueta.

¡Juntos saldremos de esta!