La crisis sanitaria que estamos viviendo ha cambiado nuestras vidas por completo. De golpe, hemos pasado a estar en cuarentena sin poder salir de casa, y eso afecta emocionalmente de diferente forma a las personas.

En estos días, es normal sentir emociones fuertes de tristeza, miedo, hastío, enfado, falta de control… No hay que preocuparse por tener estos sentimientos, pero sí hay que tener claro que son producto de las circunstancias en las que nos encontramos.

Las emociones pueden ir variando a lo largo de los días, así que no es de extrañar que un día estemos bien y al siguiente no tanto. Lo más importante es saber identificar las emociones y no dejarse llevar por ellas. Una forma de alivio es compartirlas con personas cercanas, así como hacer respiraciones centrando la atención en ello.

Es importante enfocarse en lo que sí podemos hacer en este Estado de Alarma. Crea una rutina diaria y trata de cumplirla. Dentro de esta rutina, añade momentos de ocio y aprovecha para desconectar. No estés permanentemente expuesto a los medios de comunicación y procura hablar con otras personas de otros temas.

Ayuda a las personas que te rodean y cuida de ellos. No te dejes arrastrar por la pereza, mantén tus rutinas de higiene, alimentación y sueño. Y también intenta añadir ejercicio físico en casa, pero con cuidado de no lesionarte.

Mantén el contacto social con los amigos y la familia. Será bueno para ti y para ellos.

¡Ánimo!