Sin necesidad de caer en tópicos o en frases manidas, está claro que la Covid-19 nos ha cambiado, aunque sea de soslayo. Hemos aprendido una nueva forma de vivir, adaptándonos a las circunstancias para cuidar de los demás y de nosotros mismos. En estos momentos, en los que seguimos con el virus activo y con un repunte de casos, hemos querido recopilar la experiencia y visión de diferentes personas de la empresa.

Catia Fontes do Espírito Santo – Lanzarote

Creo que estos últimos meses los he vivido como todos, pero yo, sobre todo con incertidumbre y a veces con miedo. Y ahora estoy haciendo autoconfinamiento. No salgo a no ser que sea para hacer la compra o ir al gimnasio. Cuando llego a casa, además de darme una ducha, desinfecto las llaves y todo lo necesario. 

No estoy quedando con amigos, ni yendo a casa de nadie porque está habiendo casos entre residentes y es difícil saber quién está contagiado y quién no.

Sinceramente, creo que hay gente inconsciente y que no ha aprendido nada. No quiero imaginarme un nuevo confinamiento”.

Jaime Lozano – Gran Canaria

“Cuando nos hemos reunido con amigos y familiares, hemos llevado la mascarilla y nos hemos saludado con el codo. Creo que hemos actuado dentro de esta nueva normalidad. 

Creo que hay gente que cree que esto es una mentira o le quitan importancia y se dejan ir, no cumpliendo con las medidas sanitarias, saliendo de fiesta… Y aunque crean que sea una mentira o no, habrá que seguir las medidas. No tienen argumentos para hacer lo contrario, así que solo por conciencia social, ya no debería de ser así”.

José David Paiz – La Palma

“Como convivo con mis familiares, he mantenido una vida normal, aunque con amigos sí que hemos mantenido la distancia, evitando los abrazos y con la mascarilla puesta. Ni besos ni abrazos, si acaso algún toque en el brazo. 

Cuando salgo a la calle evito aglomeraciones y sigo los que dicen las autoridades. Y aquí, en el almacén, desinfecto a diario las zonas críticas. En el baño hay colocados dos carteles para que cada vez que se utilice, la persona lo desinfecte.

A nivel profesional yo soy muy escrupuloso. A lo mejor me llevo alguna mala respuesta porque soy demasiado meticuloso, pero convivo con familiares que son de alto riesgo y no quiero tener problemas por ese motivo.

Yo creo que hemos pasado lo peor, pero estamos viendo un nuevo pico. Está afectando a la gente de menos edad porque creen que no les afecta tanto, pero está claro que no siempre es así”.

Esther Santos – Gran Canaria

“En las últimas semanas he quedado, como todo el mundo, pero no con mucha gente. En mi familia solemos hacer grandes reuniones, y desde que empezó todo esto no las hemos hecho. Nos hemos visto, pero de forma individual. 

Cuando he quedado con amigos siempre ha sido en terrazas. No quiero estar en sitios cerrados. Con mis padres, que son más aprensivos con el tema y no convivo con ellos, he mantenido la distancia. Ellos sentados en un sofá y yo en otro. 

Como soy un poco arisca, he resistido bien la tentación de darles un abrazo o un beso, así que entre comillas esto me ha venido bien. 

Yo creo que la gente joven no conoce demasiados casos de gente que ha tenido el virus. Si fuese así, pienso que serían más cuidadosos”. 

Ramón Ramírez – Fuerteventura

“En estas dos últimas semanas, me he dado cuenta de que la gente anda con un poco más de cuidado, y uno también intenta conservarse un poquito más, siendo muy meticuloso. 

Lo que he hecho, para evitar riesgos, es usar mucho la mascarilla y el gel desinfectante. Teniendo cuidado de mantener la distancia de seguridad siempre al tratar con los clientes.

Opino que hay gente muy inconsciente, que no respeta el peligro que tiene esta enfermedad y que no piensa en la sociedad. Y ni en ellos mismos.

Mis padres son mayores y tienen patologías graves y he reducido mucho las visitas. Como mi trabajo es en la calle, me expongo mucho, así que he tomado esa decisión”. 

Brian Trujillo – Tenerife

“Además de seguir las medidas sanitarias a rajatabla, estoy siendo bastante estricto cuando hago deporte. Es una parte importante de mi vida y mientras sea posible, quiero seguir disfrutandola.

Con tres amigos más, hemos creado una burbuja de entrenamiento. Es decir, solo hacemos entrenamientos conjuntos entre nosotros una o dos veces por semana. Mantenemos la distancia cuando hablamos, no compartimos botellas de agua, y dejamos unos metros de distancia cuando estamos corriendo. 

Y como cada uno tiene que ir a un ritmo diferente, nos coordinamos para que el más rápido vaya delante. Tampoco nos abrazamos, ni chocamos las manos. Es un poco extraño, pero somos conscientes de que es lo correcto en estos tiempos”.

Estos han sido algunos puntos de vista de personas que forman parte de la familia de Aperitivos Snack, porque en estos momentos, debemos comportarnos precisamente como eso. Cuidando de nosotros mismos, cuidando de los demás y velando por el cumplimiento de las medidas sanitarias, tanto dentro como fuera de la empresa. Así lograremos minimizar los riesgos, seguir con nuestra actividad y proteger al conjunto de la sociedad.